¿QUÉ SE ESTÁ COCIENDO EN VACUNAS COVID-19?

Entramos en una nueva etapa de la pandemia de Covid-19. La primera hornada de vacunas y las medidas ya nos han mostrado hasta dónde pueden llegar. No son suficientes para acabar con el virus, aunque sí nos están acercando a una vida más normal.

Hay 2 problemas en esta nueva etapa a los que nos debemos enfrentar y solucionar si queremos erradicar la enfermedad:

1)    las vacunas actuales no evitan la transmisión del virus;

2)    la inmunidad adquirida por vacunas o por pasar la enfermedad no es muy duradera.

Hoy voy a hablar de la nueva generación de vacunas que nos ayudarán a solucionar el punto (1) ya que pueden evitar la transmisión del virus. Son las llamadas “esterilizantes”, que se aplican en la parte interior de la nariz y generan inmunidad justo en el lugar por donde entra el virus: las mucosas de la nariz. Repasaré cinco de ellas, que emplean distintos enfoques para esta difícil tarea.

La vacuna mejicana “Patria”

La primera, la más avanzada, se está desarrollando en México y ya ha superado la fase I de ensayos clínicos, es decir, un pequeño estudio en 91 personas. Se trata de una vacuna basada en un virus recombinante que expresa la proteína Spike del SARS-CoV-2. El método de producción es el tradicional con el que se produce la vacuna de la gripe, utilizando huevos embrionados. La vacuna ha resultado segura y genera inmunidad cuando se administra por vía intramuscular, y aún mejor cuando se administra una primera dosis por vía intranasal y una segunda por vía intramuscular:

FIGURA 1-Frecuencia de individuos con anticuerpos tras vacuna intramuscular (IM), intranasal (IN) o intranasal seguida de intramuscular.

La vacuna española de Luis Enjuanes

Las demás vacunas se encuentran todas terminando los estudios en animales. Comienzo con la española, que se está desarrollando en el laboratorio de Luis Enjuanes, y se encuentra realizando estudios en macacos tras finalizar exitosamente los estudios en ratones. Se trata de una emulación sintética del virus SARS-CoV-2 que carece de las partes que le confieren patogenicidad, y se está probando con administración intramuscular o nasal:

La vacuna francesa que protege en los pulmones

La tercera se está desarrollando en el Instituto Pasteur de Francia y se planea como un refuerzo de la vacuna intramuscular.  Se ha inoculado en ratones una vacuna intranasal basada en un vector lentiviral que expresa la proteína Spike de la variante Delta de SARS-CoV-2. Se ha administrado tras dos dosis intramusculares de una vacuna de ARN. Los resultados son muy buenos, observándose gran protección a nivel de mucosas vía IgA (los anticuerpos específicos de las mucosas) y del pulmón vía células B y T de memoria residentes:

FIGURA 2 - Porcentaje de células B de memoria residentes en el pulmón con vacuna de ARN o con ARN + distintas dosis de vacuna intranasal.

La vacuna contra todos los sarbecovirus

La cuarta, desarrollada en la Universidad de Yale de EEUU, consiste en un spray nasal que contiene la proteína Spike y se administra a continuación de una vacuna intramuscular. Al igual que ene el estudio francés, en ratones se han generado IgA en las mucosas y células B y T residentes en los pulmones. La diferencia es que no se necesita ningún adjuvante ni vector viral y, además, produce inmunidad general contra cualquier sarbecovirus (la familia a la que pertenece SARS-CoV-2):

FIGURA 3 - Descenso del título viral y la patología pulmonar en ratones que reciben el refuerzo en forma se spray nasal.

La vacuna tejana

La quinta vacuna se está desarrollando en la Universidad de Houston, EEUU, y consiste en un spray nasal conteniendo la proteína Spike de SARS-CoV-2 y un adjuvante. Al igual que las dos anteriores, resulta en protección a nivel de mucosas y pulmones en ratones:

FIGURA 4 - Producción de IgA y células T en mucosas y pulmones

Con tantas candidatas, esperamos que pronto tengamos varias vacunas intranasales  aprobadas y podamos pensar no sólo en reducir hospitalizaciones y muertes, sino en erradicar el virus. Como ya se hizo en su momento con la viruela, o casi se ha hecho con la poliomielitis. Así acabaremos con el baile de variantes y oleadas que nos está impidiendo planificar nuestra vida a varios meses vista.